Los espacios australes
de ritmos paralelos
son habitados y habitables
por quimeras divergentes.
Los perdurables movimientos de ondas de arco iris
se bifurcan y encadenan
como aros anacrónicos y equidistantes.
Agitadas y ondulantes, a través de estos sistemas infinitos
las opalinas del cielo descansan con languidez
como en un sueño acariciante de vaporosas lumínicas
bajo los volátiles y sempiternos cometas.
No hay comentarios:
Publicar un comentario